Hugo Chávez, el "David" venezolano




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Jueves 6 de septiembre del 2012


HUGO CHAVEZ, EL “DAVID” VENEZOLANO

Por Hernán Maldonado

El petrodictador venezolano Hugo Chávez Frías, según las encuestas oficialistas, tiene una ventaja de al menos 20 puntos para superar al opositor Henrique Capriles Radonski en las elecciones presidenciales del 7 de Octubre.

Sin embargo esa “ventaja” sólo podría ser el resultado de encuestas amañadas porque el propio Chávez admite que su rival a derrotar es el “Goliat” (Henrique Capriles Radonski).

En reciente alocución por cadena nacional de radio y TV, Chávez, quizás traicionado por el subconsciente, dijo que se consideraba el David bíblico ante Goliat que “está respaldado por la gran prensa nacional e internacional”.

Al locuaz petrodictador se le olvidó que tiene en sus manos a 450 medios entre radios, periódicos, revistas, semanarios y televisoras. Inclusive cuenta con Telesur, la cadena internacional de la que es el principal, sino el único patrocinante.

En un arranque de candidez admitió que debe valerse de cadenas nacionales para llevar su mensaje al país. Y es que parece que pocos son los que leen, escuchan o ven sus medios.

Venezolana de Televisión, que se supone es del Estado y no de su propiedad particular, tiene baja teleaudiencia. El peor fracaso es TVes con sólo 3% de telespectadores.

Ese canal pertenecía a Radio Caracas TV, acallada hace 5 años por Chávez y expropiados sus equipos. Tenía una teleaudiencia de 43%.

Medio centenar de radioemisoras fueron acalladas por Chávez hace 3 años lo que llevó a autocensurarse a otros me6dios. El gobierno obligó también a despedir a comentaristas opositores.

La única televisora independiente que resiste al acoso gubernamental es Globovision, que no tiene alcance nacional. El gobierno se niega a ampliarle sus frecuencias.

Globovision ha resistido hasta ahora valientemente, inclusive cuando tuvo que pagar multas millonarias por supuestas faltas contra la ley de telecomunicaciones.

A pesar de todo esto, Chávez se queja de estar en desventaja y en el último mes de campaña arrecian sus cadenas obligatorias. Por coincidencia se producen cuando Capriles habla ante multitudes en pueblos del interior del país.

El petrodictador anda enfurecido porque no sale de su encierro del Palacio de Miraflores dado su precario estado de salud. Para nadie es un secreto que el cáncer no lo abandonó.

Esa la razón de su campaña microfonera y en sus intervenciones derrama veneno puro contra su joven rival advirtiendo a Venezuela que estallará la guerra civil si no es reelgido.

Un campeón de la confrontación, como lo es sin duda, se siente dolido de que Capriles no le responda a sus insultos y ni siquiera lo nombre porque se refiere a él como el “candidato reeleccionista” o “candidato del oficialismo”.

El gobierno está empeñado en mostrarle al país que Chávez es inderrotable, pero otra cosa están mostrando las desbordantes multitudes que acompañan a Capriles en su recorrido por pueblos y ciudades.

El “flaquito”, como lo bautizó el electorado afin, parece ser el verdadero “David” ante el “Goliat” que, de paso, está derrochando dinero a manos llenas con un mar de propagandas, gigantografias y vallas para prometer obras y servicios como si no hubiera estado ya en el poder 14 años. Amanecerá y veremos.